¡Hola! ¿Cómo estáis?
Antes de nada pedir disculpas por mi ausencia todos estos días en el blog... se que ha pasado demasiado tiempo, pero no sabéis la cantidad de trabajo que he tenido... y además tengo que daros una noticia: ESTOY EMBARAZADA.
Estos meses he estado organizándome en el trabajo, yendo a los médicos y a clases de yoga. Además con las reuniones navideñas y de una casa para otra, no sabía cuando sentarme en el ordenador para escribir esta entrada, hasta hoy.
Estoy embarazada de tres meses y, la verdad, que está siendo una experiencia única, algo tan diferente a todo lo vivido en mi vida... y a la vez ¡tan emocionante! Andrés y yo, desde el día que nos enteramos, vivimos en una nube de ilusión y felicidad constante y todo lo que hacemos en nuestro día a día y las decisiones que tomamos son pensando en nuestro futuro bebé.
Aún no me han dicho el sexo y estamos barajando los nombres (una pelea continua, porque tenemos gustos diferentes, jaja). Así que si alguien puede aportarnos ideas, estaríamos encantados de escucharos.
Sigo trabajando y colaborando en el mundo de las bodas, pero si que me gustaría enfocar ahora el blog a mi vivencia siendo madre primeriza. Cómo todos sabéis, empecé mi blog para explicar mi experiencia como novia primeriza, sin tener ningún referente de confianza que estuviera pasando por lo mismo, pues bien, en mi situación de embarazada me pasa lo mismo. Soy nueva en este mundo y soy la primera de mis amigas y familia que me encuentro en esta situación, excluyendo por supuesto a mi madre, que es la que más me está ayudando en todo esto.
Me gustaría expresar a través del blog, todos mis sentimientos, mis vivencias y mis anécdotas en lo relacionado con el embarazo. Desde la cosmética que utilizo y los cambios en la comida que he tenido que hacer hasta mis gustos personales por la ropa o la decoración de la habitación de mi futuro hijo/a.
Me encantaría que si muchas de los que me leéis habéis sido mamás o estáis embarazadas podáis contactar conmigo para intercambiar ideas y puntos de vista ¡me encantaría!
Voy a explicar cómo ha sido nuestra historia hasta el día de hoy. Todo empezó cuando en Octubre, tras cuatro meses de casados, tuve una falta en mi período, dejé pasar 20 días y me hice el test, fue algo fulminante, dio positivo al instante y Andrés, que estaba conmigo, se puso a dar saltos de alegría por toda la casa.
Enseguida pedí cita a mi ginecóloga y me confirmó que estaba embarazada de seis semanas. Ella me dio las primeras pautas a seguir en el embarazo y me aconsejó que hasta las 10 semanas no dijéramos nada a nadie. Y así fue, cada día se me hacía más difícil no poder explicarle a nadie cómo me sentía y sólo podía compartir mi felicidad y mi preocupación con mi marido.
Tuve que dejar las clases de zumba, por ser movimientos arriesgados para ese período del embarazo, en el que los tres primeros meses son decisivos. Se aconseja mucho reposo y caminar. Pero seguí trabajando como el primer día. A día de hoy practico yoga y natación, actividades muy saludables y recomendadas para las embarazadas.
Llegué por fin a las 10 semanas de embarazo, me hicieron una ecografía en la que se veía perfectamente el feto, se veían sus orejas, sus brazos y sus piernas y fue, entonces, cuando organizamos una comida con nuestros padres. Yo estaba de los nervios, me temblaba el pulso, no podía comer, pero en cuanto Andrés lo dijo, todo cambió. Nuestros padres se volvieron locos de contentos y enseguida quisieron celebrarlo con un brindis y con muchos besos y abrazos ¡fue algo tan bonito!
Así que una vez dicho a nuestros familiares, empezamos a dar la noticia a nuestros amigos y conocidos y es, cuando entonces, empiezan a llegar los regalitos. Todo regalos para un bebé al que, sin conocerle de nada, todo el mundo quiere.
Es un sentimiento indescriptible. En mi caso, he tenido la suerte de conocer el amor verdadero en varias ocasiones: lo he visto en mis padres, en mis abuelos y lo veo en mi marido, pero el amor que siento ahora hacia mi futuro hijo es un amor que traspasa las fronteras, un amor inmenso que será PARA SIEMPRE.
Aquí está nuestro bebé:
